Kris Kristofferson

Kris Kristofferson

Las personas normales somos “normales”, entre otras razones, porque no solemos destacar, con suerte, más que una cosa o, quizá, un par de cosas. Y confirmamos que lo somos cuando tenemos noticia de seres no-normales -y por eso extraordinarios- a los que la fortuna o la genética han premiado con todo un generoso racimo de habilidades con las que destacar y aun alcanzar la gloria en todo un dorado abanico de actividades y dedicaciones.

Kristoffer Kristofferson (Brownsville, Texas; 22 de junio de 1936), hijo de un general del ejército de los Estados Unidos, fue un estudiante excelente, un deportista de élite que apareció en Sports Illustrated, un titulado universitario “summa cum laude” en Literatura en Estados Unidos, ganador de una beca en Oxford y militar de carrera retirado a los 30 años con el grado de capitán.

Pero además y sobre todo fue un artista colosal que destacó como músico, cantante, compositor y actor cinematográfico.

Y tuvo ocho hijos con tres esposas.

Pero no todo sale gratis en esta vida ni para los cambios bruscos suelen estar los caminos expeditos: pasar de hijo y yerno perfectos a artista que vive de su trabajo le costó perder el respeto de su familia paterna casi para siempre y rozar la miseria cuando, con su primera mujer y sus tres primeros hijos, se plantó en Nashville dispuesto a convertirse en artista country.

Kris Kristofferson era quien barría el estudio donde, en 1966, Bob Dylan grabó su “Blonde on Blonde”. Y ni se atrevió a acercarse al de Minnesota.

Al que sí supo arrimarse para vender sus canciones fue a Johnny Cash y también a Jerry Lee Lewis o a Roger Miller, quien grabó “Me and Bobby McGee” unos años antes de que Janis Joplin la convirtiera en su mayor éxito (póstumo) y en un himno universal.

Y a partir de ahí, con 35 años, le llegaron los triunfos y una carrera profesional como artista durante 50 años.

Con la lista de hoy, que se me ha ido a los 90 minutos, he intentado dos cosas. Por un lado, mostrar un catálogo amplio de toda la gente consagrada (Elvis, Sinatra, Jack Ingram, Johnny Hartman, Al Green, Calexico, Brenda Lee, The Everly Brothers…) que ha interpretado canciones de Kristofferson. Y, por el otro, dar una idea cabal de la extraordinaria calidad de este material a través de canciones realmente perfectas: “For the good times”, “Nobody wins”, “You show me yours…”, “With one more look…”, “Why me Lord”.

José Preciado