«Landman» (Sky Showtime 2024)
“Landman” es otra serie más del megaprolífico Taylor Sheridan (“Yellowstone”, “1923”, “Wind River”, “Sicario”, “Tulsa King”, “Comanchería”…) que cuenta la vida diaria del director general de una pequeña empresa petrolera del oeste de Texas que trata de lidiar -además- con la súbita reconstrucción de su vida familiar por un nuevo capricho de su exmujer, interpretada por Ali Lartes como una especie de caricatura muy machista de la mujer trofeo.
No os ocultaré que “Landman” es convencional, previsible, reaccionaria, el reverso grasiento y sudado del universo “woke” y hasta ridícula y tramposa en ocasiones, pero, como diría su protagonista, también es “jodidamente divertida” y, una vez que lleves capítulo y pico, va a ser complicado que dejes de ver los siguientes.
Como en tantas ficciones televisivas “mainstream”, el truco está en el auto-zapping, resuelto aquí de manera descarada con cambios bruscos (a veces, demasiado) de escenario, personajes, circunstancia y tono, todo ello llevado con desenvoltura y casi con el mismo cinismo que exhibe el protagonista, Tommy Norris, interpretado por Billy Bob Thorton con el carisma habitual y unos diálogos que parecen escritos a medias entre un taladro con la broca un tanto roma y una navaja de afeitar poco temible, no obstante efectivos y casi siempre lúcidos.
“Landman” es también la serie que nos merecemos por habernos tragado durante tanto tiempo y sin rechistar tanta mandanga progre que ha proyectado sus mundos de hada madrina de Cenicienta en el presente, pasado y futuro con el mismo contacto con la realidad que aquella calabaza capaz de ser convertida de carroza principesca. Los pendulazos son así y esta vez vienen con impulso.
Y “Landman”, musicalmente, viene llena, como no podía ser de otra manera en una serie que resuda testosterona texana, de country, western, honky-tonk y outlaw de la mano de algunos veteranos como Cody Jinks o Nathaniel Rateliff, pero sobre todo con canciones de gente muy joven, pero sobradamente eficaz, con apenas dos o tres discos en el mercado. Os he hecho una selección de una hora sin levantar el pie del acelerador.
